You just can't buy illusions

02 agosto 2012

Cariño

Bueno, no tarde mucho en regresar. Como comentaba anteriormente (hace unos instantes), hoy paso para compartir algo un tanto personal y etc. También es algo que me afecta, pero tengo fe de que escribiéndolo acá me alivie un poco.

Tengo demasiado cariño para dar en mi pequeño cuerpo, y a la vez mucha frialdad en mi cabecita para demostrarlo. Mala combinación. Por eso a veces, una vez que lo demuestro, a veces exagero mi demostración sobre todo físicamente hablando (suelo ser muy cargosa). Pero otras veces lo reprimo hasta casi matarlo. El punto es, que existía un punto donde podía volcar todo mi cariño libremente sin retraerme. Y hoy no lo tengo mas, y de un modo u otro me esta afectando. Extraño a mi perro. A mis perros.

Si algo malo tuvo este año es que mi perro, Jeffrey, mi gordito, mi chucho, que hacia 14 años ya que nos acompañaba, falleció. Realmente no pensé que lo iba a extrañar tanto, pero me impacto y mucho.
Y luego de un tiempito, aparecio Milo en ntras vidas, mi bombón, el perro más lindo del mundo. Pero luego de casi 3 meses, se fue con otro. Y dios que lo extraño.
El punto es, que, independientemente del cariño particular que le tenia a cada uno de ellos, necesito una mascota. El perro es sin lugar a dudas, una compañía invaluable.
A mi perro le podía decir cuanto adjetivo lindo se me venia a la mente, miles de veces y con el tono más acaramelado del mundo y ni gramo de culpa o censura al respecto. Y si bien no entendía ni un vocablo, recibía cariño igual. Lo podía acariciar, mimar, incluso abrazar y demás, y me sentía llena. Mis mascotas no esperaban nada de mi, no me reclamaban, no podian decirme nada que me hiriera o me refrenara, siempre eran bienvenidas mis muestras de afecto y solo ntra presencia en la misma habitación era suficiente para estar acompañados. Hoy me falta eso. Ninguna persona, actividad ni comida me pueden dar lo que mis perros me daban.Y uno no se da cuenta lo que tiene hasta que lo pierde, realmente.
Pero bueno, la vida sigue. No quita que los extrañe, pero estan mejor ahora. Y la vida no va a pararse hasta que lo supere, todo continua. Pero realmente hay que saber valorar a ntras mascota, nos dan mucho mas de lo que nosotros creemos. El dia de mañana con mi proxima mascota voy a tratar de hacer las cosas mejor y apreciar mucho mas su compañia. Y espero que eso ocurra pronto, realmente la necesito.

Con eso concluyo mi entrada de desahogo. Adiós.

No matemos la emoción

Bueno, luego de varias semana de abandono, retorno nuevamente a mi blog. Hoy para hacer una entrada un tanto personal y con un tema irrelevante en si, pero importante para mi.

Pero en primer lugar, antes de hacer esa entrada, me dirijo a otra cuestión, que es agradecer este espacio y hacer notar que lo necesito. En serio, ultimamente me estoy dando cuenta de lo indispensable que es compartir como esta uno, expresar lo que le pasa, decir lo que uno piensa, sentir que esa emoción que nos invade no muere en nosotros si no que sale a flote, que alguien o algo la recibe. Para mi lo mejor es tener a alguien con quien poder hacer todo esto, pero a veces no es el caso; a veces cuesta. A mi particularmente me cuesta mucho; me he llegado a convencer de que no hacia falta sacar todo lo que uno tiene por dentro, y que son cosas para dejar en segundo plano. Hoy me digo que no, no me parece así. Si bien tampoco creo que hay que vivir expresando todo lo que nos pasa en el preciso momento que nos pasa y de la primer forma que se nos ocurre, descreo hoy por hoy de la idea que hay que ignorarlo. También hay que aprender a discernir. Hay temas que se prestan para la exageración, que no la ameritan, temas que uno se guarda, que son una bomba de tiempo. Pero bueno, así es la vida, la piloteamos como podemos y aprendemos siempre algo nuevo! Lo que aprendí yo por esta vez, es que no esta mal mostrarse como está uno. En particular, cuando uno esta afectado; es entendible no querer que la vecina lo note, pero no tiene nada de malo (al contrario) querer apoyarse en algún afecto cuando uno esta así, comentarlo, desahogarse, creo que se sigue adelante mejor sin tanto peso encima. A veces incluso ese peso se vuelve mas del que realmente debería ser, y pudiéndolo aliviar, ¿por qué no hacerlo?
En este caso, mi blog me sirve para explayar mi ideas, pero me puedo permitir cargarlas de emociones sin prejuicio de que es una debilidad o cursilada- es humano. Los humanos pensamos, y como reflejo sentimos, basta de querer matar la emoción, la sensibilidad. Nunca me considere una persona sensible, pero esta bueno permitírmelo un rato. El arte por ejemplo, me atrapa, me apasiona, pero también le estoy permitiendo que me sensibilice aunque sea unos instantes, sin mi voz interna gritándome "maricona!" cuando lo hago. Y esta bueno porque también me calma un poco, así que puedo evitar engañarme con que me estoy descargando con tweets tediosos y vacíos o con una charla superflua.

En fin, necesitaba decirlo, como muchas otras cosas mas. También necesito tener argumento escrito en caso de que me abatate, jaja. Pero en conclusión, escribir me hace bien, si lo dejo.

Ahora me despido (por ahora!), au revoir.