You just can't buy illusions

04 junio 2015

Ella.


Me fui con tanta determinación, tantas ganas, que lo pienso hoy y me parece inverosímil. Me acuerdo de tener las ideas fijas, los objetivos claros. Me envidié.
Parece que ya no está más. A veces la extraño. A veces no. A veces lloro por ella. Puede que vuelva. Puede que no. No sé si llamarla, esperar a que venga, recibirla con brazos abiertos o decirle que ya su tiempo pasó. No sé que hacer con ella. Pero después pienso ¿tendré que hacer algo con ella? Que haga lo que quiera. Después veré...

Encuentro.

Cuando lo conocí, descubrí una parte de mí que creía era falsa.
Me vi genuinamente cariñosa. Empecé a demostrar mi cariño sin pena ni culpa, las palabras dulces, los abrazos, los gestos, todo tan natural. Ya no lo reprimía, ni tampoco lo forzaba. Mi parte fría se encontró con una parte mas cálida, y la convivencia se dio.
No es que nunca había amado antes. No es que nunca senti cariño ni aprecio.
No me hizo conocer el amor, pero si manifestarlo.
Hizo que desafiara todas esas reglas auto-impuestas que creía que existían. No lo cuestione. No lo dude. Lo dejé ser. Fui. Soy. Quiero. Amo.